Los niños están en casa y a veces no sabemos qué hacer con ellos para que no estén todo el día viendo televisión. Por suerte, Plastilinarte te trae ideas. Además, como es nuestra especialidad, te explicamos los beneficios de estas actividades para el desarrollo de los niños. Aquí cinco ideas para hacer con niños desde 4 años:

1.- Pintar con sal: aunque no lo creas, la sal puede pintar, ¿cómo? ¡Muy fácil! Lo primero que harás será servir un poco en una bolsita plástica y adentro poner una tiza de colores. Luego frota la tiza contra la sal. Es mágico, verás cómo la sal se pinta del color de la tiza. Cuando tengas sal de varios colores, hagan un dibujo en equipo sobre una cartulina. Con un pincel agrega pegamento de manera progresiva a las secciones del dibujo y pon la sal de colores. Luego sacude suavemente para que caiga el exceso de sal. 

El beneficio: recomendamos hacer esta actividad junto a los niños, en equipo. Este tipo de actividades nos ayudan a enseñarlos a dialogar y ponerse de acuerdo. Es importante, como adultos, respetar sus opiniones y no imponer las nuestras. Al momento de hacer el dibujo, escuchemos lo que dicen para lograr hacer el trabajo en colaboración. Debemos ser equilibrados y no irnos al extremo de dejarlos trabajando solos, ni hacerles todo el trabajo. Adicionalmente, pintar con sal tiene numerosos beneficios sensoriales, principalmente desarrollando el sentido del tacto. También podemos explorar haciendo dibujos sencillos y pedirle al niño que lo identifique con los ojos cerrados sólo tocándolos.  

2.- Frottage y estampado orgánico: para esta actividad recolectaremos del parque hojas de árbol caídas. Para hacer la técnica del frottage las pondremos bajo una hoja de papel bond y luego frotaremos por encima con creyones de cera. Podemos hacer esto con diferentes objetos, como un peine o una moneda. Luego, con un lápiz, podemos agregarle algunas líneas para convertir ese objeto en otra cosa. Prueba frotando varios colores sobre el mismo objeto para que se vea así:

Para la técnica del estampado le pondremos pintura a las hojas de árbol para marcarlas sobre el papel. A la figura estampada también podremos dibujarle líneas para convertirlas en una nueva imagen. 

El beneficio: Al igual que la actividad anterior, recomendamos hacerla en equipo, por los beneficios ya mencionados. Adicionalmente, cuando estampamos una figura en una hoja y luego buscamos convertirla en algo más, estamos planteando un desafío por medio del cual el niño tendrá que buscar soluciones creativas y diferentes a un problema determinado; esto podrá ayudarlo tanto a en aspectos académicos, como en resolución de problemas del día a día y de tareas cotidianas. Por medio de ello, descubren que un mismo desafío puede tener distintas maneras de solucionarse, y que ellos pueden encontrar sus propias herramientas.

3.- Marionetas con reciclaje: con un tubo de papel de baño haremos marionetas con las que podamos jugar. Aquí te damos algunas ideas, pero puedes hacer una completamente a tu estilo. Nuestra marioneta será un personaje que abra la boca muy grande. 

Corten un tubo de cartón a menos de la mitad. Con la pieza más grande haremos el cuerpo, y con la más pequeña, la cabeza. Pueden empezar dibujando su personaje en el tubo con pintura o creyones de cera, luego lo ensamblaremos. 

Para armarlo cortaremos dos círculos del tamaño del tubo dibujando su contorno en una cartulina. Estos círculos serán la parte interna de la boca, y los pegaremos con cinta adhesiva, recuerda colorear estas piezas, poniéndoles dientes o dibujando una lengua. Uniremos ambos tubos con un trozo de cinta adhesiva o pegándoles una tira de papel bond, por la parte de afuera y por un solo lado. Esto nos permitirá que abra la boca sin despegarse. Para manipularlo fácilmente puedes pegar, por la parte de atrás, donde está la cinta adhesiva, una paleta de helado.  Luego puedes ponerle cabello usando estambre o tiras de papel

El beneficio: por medio de esta actividad reforzamos aspectos narrativos e imaginativos, ya que los niños podrán poner nombre a sus marionetas e inventar historias con sus personajes. Adicionalmente, potenciamos el desarrollo de la motricidad fina, la cual nos ayuda en aspectos motores como toma del lápiz, recorte con tijeras, entre otros fundamentales para el proceso educativo. Al igual que con las actividades anteriores, llevar a cabo actividades como esta, en equipo, brinda espacios para disfrutar con ellos y conocer más sus gustos, logrando estrechar los vínculos de cercanía y confianza, los cuales son fundamentales para fortalecer su desarrollo emocional. 

4.- Collage de texturas: No todos los dibujos tienen que ser permanentes, ni tienen que ser con lápices o creyones. Podemos hacer dibujos efímeros con objetos. En este caso haremos paisajes y composiciones con diversos materiales. Esta vez el trabajo no tendrá un dibujo previo, sino que lo iremos modificando sobre la marcha. Elige una serie de materiales con diversas texturas: algodón arena, tierra, hojas secas, piedrecitas. Ahora con ellas haremos un dibujo sobre una cartulina (si es negra, resaltará mucho más). El dibujo, por supuesto, lo haremos en equipo, y esta vez lo podemos ir modificando para ir contando juntos una historia. 

El beneficio: Esta actividad nos permite trabajar la creatividad, la cual es una capacidad clave para el progreso de la sociedad, la resolución de problemas y el pensamiento flexible. Además, trabajamos las capacidades narrativas y desarrollamos comunicación asertiva.

5.- Pintar con plastilina: ¡Por último nuestra favorita! Además de modelar figuras, la plastilina nos permite hacer montones de técnicas muy divertidas. Pintar con ella es divertidísimo y muy sencillo. Es importante que uses plastilina escolar en barras y no masa de modelar (esa muy suave que viene en pequeños tarros plásticos); porque la masa se seca y perderán el trabajo. Lo primero será hacer un dibujo a lápiz sobre una cartulina o cartón, recomendamos no hacer detalles muy pequeños, porque son más difíciles de rellenar. Luego amasamos la plastilina para que esté suave y sea más fácil usarla para pintar. La cortamos con la mano en pedazos pequeñitos y comenzaremos a estirarlos sobre el dibujo. Es importante que los estires, porque si solamente los pones encima de la cartulina y los presionas, se va a despegar.

Los beneficios: la plastilina, trabajada adecuadamente, nos permite desarrollar motricidad fina, la cual es fundamental en el desempeño escolar de los niños, pues sin ella se dificulta el aprendizaje de la escritura. Además, la plastilina nos ayuda a desarrollar en los niños concentración y tolerancia a la frustración. Con esto último podemos ayudarlos a reducir las malas reacciones  y canalizar mejor sus emociones. 

En este caso, la actividad nos permitirá trabajar motricidad fina. Es importante que el dibujo previo lo hagan a lápiz para que puedan corregirlo las veces que haga falta. A veces los niños se impacientan y quieren desechar cada dibujo que les sale mal; pero es importante enseñarlos a terminar las cosas que empiezan y que ellos sí pueden hacerlo; debemos invitarlos a continuar y evitar hacerles el trabajo.